Desde los cuadrantes de Ohio hasta el flamante John C. Maxwell, desde el carismático Ghandi hasta las experiencias de Jack Welch. Odiados como amados, los líderes siempre han sido parte de la historia y estudiados para comprender las bases que motivan al ser humano a buscar más allá de sus propias convencionalidades. El liderazgo ha sufrido cambios a través de la historia. Antiguamente se basaba en un sistema jerárquico que establecía una dirección para otras personas, un protagonismo para el líder y un resultado adaptado a sus propias necesidades. En la actualidad mucho dista esa imagen de líder de lo que se quiere alcanzar al estar frente a la responsabilidad de guiar a otros al éxito o, ¿por qué no?, al fracaso.
Los modelos y teorías de liderazgo son múltiples, desde muy básicas a muy complejas. Actualmente se estudia para ser líder. Se ha complicado tanto el proceso de aprender liderazgo que la diversidad de autores y programas de entrenamiento han hecho que el liderazgo se vea como un oficio arduo y difícil de llevar a cabo con buenos resultados. Sin embargo, ser líder es una decisión y un compromiso, más que un trabajo y una carga a llevar en los hombros. Aquellos que eligen ser líderes o preparase para tal fin, tienen diversos modelos a escoger, desde la teoría de la trayectoria – objetivo, la situacional, la comportamental, la basada en decisiones, el modelo de preguntas de Vroom y Yetton, la matriz del liderazgo o GRID del liderazgo, entre tantas otras. El liderazgo transformacional como se llama muchas veces en la actualidad es el modelo más buscado en librerías o programas de formación, pareciéndose mucho al liderazgo carismático pero con un sentido humano más profundo. El modelo no es lo importante, actualmente es más vital tener a un líder humano, real, informal y altamente creativo, pero en especial, humilde. Por lo tanto son las características de un líder lo que más se busca que el modelo adquirido en su experiencia o estudio.
El liderazgo, palabra que no existe pero que hemos adaptado a nuestro lenguaje, es una actitud de vida. Tanto ser líder como ser seguidores de un líder, ambas posturas son importantes. Ninguna debe disminuir a la otra. Ambas son decisiones individuales de lo que queremos hacer con el liderazgo, asumirlo o seguirlo. Lo que nos compete en este corto escrito sobre liderazgo es definir la antigua pero nueva forma de ejercer el liderazgo, más no de conceptualizarlo. Perdemos mucho tiempo, a veces, analizando teorías que poco tienen que ver con la experiencia de campo en la práctica. Lo que más necesitamos hacer, respecto del liderazgo, es describir su manera y no su teoría. Su forma de ejercerlo, de influenciar a los demás, de lograr los objetivos trazados por su equipo y reconocerlo al momento. El concepto que ofrezco de liderazgo, aunque sencillo, ofrece una forma de entenderlo muy clara y simple.El líder es, hace y deja ser y hacer a los demás. El líder ES líder, no se puede ser líder a medias. Ser el líder es como estar embarazada, estás o no estás. El líder hace cosas de líder, no confunde su rol con el de otros aunque comparte con todos por igual y en todos los niveles. Pero lo más importante es que el líder deja ser y hacer a los demás. Sabe delegar e impulsa al desarrollo de los demás. El liderazgo que promuevo, tanto en mis clases universitarias sobre liderazgo, como en mi vida personal, es el liderazgo creativo. No es un modelo o una teoría, no soy tan letrado o petulante como para pretender presentar una nueva teoría sobre un tema exhaustivamente estudiado. Solo creo que el liderazgo creativo es una forma de ejercerlo de una manera diferente, humana y efectiva, ante el mundo actual en el que nos desenvolvemos.
El liderazgo creativo se compone de tres elementos fundamentales:
- - Pasión
- - Creatividad
- - Constancia.
· La pasión el líder la obtiene de amar lo que hace. Cuando amamos lo que hacemos nos motivamos a través de la creencia de que “todo es posible” y ante la inmensidad de la fuerza del amor nos portamos de forma humilde, entendiendo que nadie es mejor ni peor que nosotros y que todos merecemos crecer y vivir la vida a plenitud. Esa pasión define al líder en los momentos difíciles porque le imprime la fe necesaria que el amor otorga a todo lo que toca. Amor, pasión y fe son una tríada poderosa que conforman las piezas del motor que mueve al líder creativo.
· La creatividad más que una herramienta es una forma de vida. Ser creativos es tener autoestima, por lo que una cosa no puede existir sin la otra. Al crear puede que me enfrente a una sociedad que no estará de acuerdo con mi creación pero mi autoestima me permite mostrarle al mundo lo que soy capaz de inventar, idear o innovar. Ser creativos nos da la posibilidad de pensar distinto, de desarrollar el pensamiento lateral de De Bono y de entender que el mundo puede verse desde miles de perspectivas diferentes. Los líderes creativos piensan distinto, tienen visión, ven luz donde otros ven oscuridad y logran tener una comprensión global más amplia de las cosas donde otros se quedan en el detalle. La creatividad es un valor que debe ser cultivado y el líder creativo invierte tiempo en entrenar a otros y cultivar este valor como un rasgo más importante que la inteligencia, tal como Einstein lo dijo una vez.
· La constancia no es más que la capacidad de seguir el curso de acción hacia un objetivo aunque todo esté en contra. Ser constante es no ceder ante la negativa de otros, las vicisitudes o los obstáculos, los cuales el líder los ve como oportunidad de mejoras. Perseverar es vencer en la adversidad y los líderes creativos no permiten que otros le roben sus sueños. Cuando les cuentan sus ideas a alguien y éste les dice: “tú estás loco…”, entonces se dan cuenta que “van por buen camino”. La perseverancia, la constancia, la continuidad son valores fundamentales en los líderes creativos y curiosamente es la característica más visible de aquellos reconocidos como “exitosos”.
El liderazgo creativo se basa en un liderazgo informal, sin protocolos, 100% asertivo y en especial con inteligencia emocional como rasgo característico de este tipo de líder. Son confiables, responsables y entienden su compromiso como una promesa de dar cabida en sus sueños a los sueños de otros que le rodean. El liderazgo creativo se puede aprender y hoy en día “debe” ser obligante para gerentes, directores, políticos, alcaldes, presidentes, en fin, todos aquellos que tengan en sus manos la vida de otros seres humanos, aprender, entrenarse, graduarse de líderes en escuelas certificadas para tal fin. Los líderes creativos son 100% responsables de sus vidas. No necesitan culpar a nadie de nada ni se quejan de lo que pasa a su alrededor o con ellos. Son líderes que tienen una máxima por estilo de vida que reza así: “Si tomas las riendas de tu vida en tus manos, algo maravilloso sucede: no tienes a quien culpar”.
El liderazgo no es más importante que la gerencia, son mutuamente complementarios. Los líderes son coyunturales, motivan e inspiran y dan sentido de dirección y pertenencia. Los gerentes están más relacionados con la complejidad de las acciones a tomar, administras recursos, ponen orden y estructuran a su equipo de trabajo de forma estratégica. Todo Gerente debe formarse como líder y a todo líder le tocará gerenciar en algún momento de su vida. Un gerente líder creativo es probablemente, sin temor a equivocarme, la pieza más valiosa que cualquier organización pueda tener. Sin menospreciar al resto del equipo, un gerente líder creativo marca la diferencia entre empresas exitosas y reconocidas, a empresas promedio desconocidas. Las características que las trasnacionales buscan al contratar gerentes en la actualidad son:
- - Que sepan saber escuchar.
- - Saber dar instrucciones.
- - Que tengan un manejo asertivo de los conflictos.
- - Que sepan reconocer el trabajo de otros ante los resultados obtenidos.
- - Que sepan delegar y supervisar sin invadir.
- - Que sepan escribir.
- - Que sepan comunicarse y dar mensajes claros.
- - Que sean efectivos en su oratoria.
- - Que sepan explicar instrucciones a nuevo personal.
- - Que sepan dar retroalimentación (feedback).
- - Que sean altamente creativos.
- - Que sean líderes con sólidos valores y principios.
Al leer esta lista podemos observar que lo más cotizado en el mercado gerencial es un gerente que sea líder y creativo. Si el desarrollo de estas características se traduce a convertirnos en una pieza clave de una empresa o ser el target más buscado por trasnacionales, ¿por qué no entrenarnos y desarrollar nuestro líder interno? Paradójicamente no son muchos los que se desarrollan como buenos líderes. Si el camino del éxito estuviera iluminado con carteles de neón, tendríamos un mundo mejor y menos caótico y obvio, no es el caso. El camino al éxito de los líderes es una montaña que presenta dificultades pero también satisfacciones. Aquellos que se dediquen al liderazgo deben saber que no será una tarea fácil. Que deberán renunciar a algunas cosas en su vida. Que les tocará sanar su pasado y reconciliarse con los miedos hacia el futuro. Deberán vivir en el aquí y ahora. Dedicarán su vida a dejar un legado. Pero así como cambiarán sus vidas también cambiarán la vida de muchas otras personas, si logran que sea para mejor, entonces la satisfacción no tendrá precio.
El liderazgo creativo en la gerencia de hoy no solo es necesario sino obligante para toda organización que desee tener éxito y dejar su huella marcada en las páginas de la historia de empresas exitosas. El liderazgo creativo no solo se ejerce en la gerencia, se ejerce en casa como padres o madres, pareja, familia, comunidad o País. El liderazgo creativo le está dando paso a un nuevo modelo por el cual, particularmente, estoy trabajando para impulsar. Es el modelo del liderazgo compartido o impersonal, es decir, el liderazgo de masas. Para el progreso del mundo, para rescatarnos a nosotros mismos de la crisis actual, se requiere que todos sean líderes. Necesitamos un liderazgo sin rostro, donde todos participen, aporten, dirijan y se dejen dirigir. Ese liderazgo de masas no define a una persona sino a muchas como autores del cambio. La máxima expresión del liderazgo creativo, su proceso evolutivo de transformación, lo convertirá en el modelo del liderazgo de masas. Como todo lo nuevo y desconocido, da miedo pero es parte del camino de la evolución humana. Necesitamos que todos seamos líderes de nuestra propia vida y así marcar el camino de las generaciones por venir. Un camino más asertivo, más sano, más humano, más tolerante, saludable, limpio y real.
El liderazgo creativo es una forma de vida, es una respuesta a tanta crisis, solo nos toca ejercer la voluntad de desarrollar a ese líder que todos tenemos por dentro y convertirlo en un instrumento de construcción, progreso y desarrollo.